Entrevista al senador Manlio Fabio Beltrones, Presidente de la Junta de Coordinación Política, al término de la elección de la Mesa Directiva para el Tercer Año de Actividades de la LXI Legislatura.

Pregunta.- Le quiero preguntar sobre esta situación que se da en Monterrey, de los casinos. En las bancadas del PAN y del PRD se han pronunciado porque se revise esta legislación; incluso el senador Labastida decía que se cancelen todos los permisos hasta que haya una nueva ley vigente.

Y también preguntarle su opinión sobre un informe que entregó ayer el ex Presidente Consejero del IFE, Luis Carlos Ugalde, según el cual esta Legislatura cumplió muy poco, porque de las iniciativas solamente aprobó 100.

Respuesta.- De esto último ¿qué dijo?

P.- Que fue una legislatura que trabajó poco, porque de cada mil iniciativas que se presentaron --casi en su totalidad-- solamente se aprobaron 100, que hay una baja productividad entre los senadores y diputados, que arroja esta Legislatura.

R.- El día de hoy el Senado de la República en Pleno se pronunció porque se haga una revisión a fondo sobre la ley, sobre el Reglamento de Juegos y Sorteos.

Sobre todo este último, que es el que ha prohijado en que proliferen los amparos, que permiten abrir nuevos espacios a estos llamados casinos, que legalmente no están permitidos.

Estoy convencido que no es nada más la ley y el reglamento lo que se tiene que revisar, sino también los actos de corrupción que alrededor del otorgamiento de estos permisos puedan existir, y que de esta manera --con transparencia-- se pueda sacar una conclusión al respecto.

Es una pena que hayamos visto perder la vida a 53 seres humanos --uno de ellos que venía en camino-- para que se haga una revisión a fondo sobre lo que la ley permite y lo que la ley no permite, pero que el reglamento prohíja.

El reglamento es una función específica del Ejecutivo, no tiene nada que ver con el Legislativo.

Yo he conocido diversos enfoques y estudios alrededor de lo que puede ser la evaluación del trabajo legislativo, me consta y debo hablar por el Senado de la República.

En el Senado, el trabajo ha sido verdaderamente enriquecedor, porque parte de la base de no revisar simplemente cuántas iniciativas se presentan y cuántas de ellas se aprueban, sino cuántas de las que se aprueban son útiles para que el país genere los cambios necesarios que necesita, a fin de poner orden y darle crecimiento al país.

Y creo que si hacemos una evaluación sobre ellos, como hoy lo llevamos por la mañana, veíamos reformas constitucionales sumamente importantes que nunca habían pasado, como la de derechos humanos, derecho a la alimentación, o también derecho de amparo --que son importantes destacar junto con trata de personas--, que nos pondrían a la vanguardia de cualquier otra legislatura.

No obstante, estoy seguro que México necesita más, y este periodo legislativo será una oportunidad para mostrar grandeza en el Senado de la República.

P.- Senador, mañana el Presidente entregará su Quinto Informe de Gobierno al Congreso, ¿Usted qué esperaría de este documento, hay mas rezagos, más avances o más puntos malos que buenos?

La segunda pregunta iría en el sentido ¿es necesario nuevamente volver a modificar las leyes, para que el Ejecutivo regrese nuevamente al Congreso a verdaderamente rendir cuentas a la Nación, pero ya con un ejercicio diferente, un formato nuevo, en donde ustedes lo puedan cuestionar o preguntar aquéllos en donde hay rezagos o dudas?

R.- Estaré muy atento a recibir el documento mediante el cual el presidente Felipe Calderón rinde cuentas a la Nación en su Quinto Informe de Gobierno.

Estoy convencido que cumplirá con esta obligación legal. De su estudio nosotros sacaremos conclusiones.

¿Qué esperamos muchos de nosotros? Que no nada más nos hable de los logros, sino que autocríticamente hable también de lo que hizo falta, y nos proponga de qué manera juntos, en momentos tan difíciles para el país, podremos en el futuro lograr solucionar estos problema que afligen a México como son: la falta de crecimiento, el desempleo, la inseguridad pública y la desigualdad social, que son materia de su trabajo.

Pero estoy convencido que con una buena propuesta todavía podemos mejorar los resultados.

Me permitiría hacer un alto en el camino hasta conocer el documento en específico para pronunciarme en su totalidad.

P.- ¿Que regrese nuevamente al Congreso?

R.- La rendición de cuentas es muy importante. La modificación que llevó a cabo el Congreso para que no fuera obligatorio que el Presidente asistiera el día primero de septiembre a entregar su informe, no quiere decir que no se pudiera implementar un acuerdo político para que, en el momento en que él deseara asistir, pudiéramos también convenir que hubiera no nada más una exposición por parte de él, sino también un intercambio en preguntas y respuestas.

Esto debe darse en un proceso de enorme madurez de nuestra democracia en el futuro y espero que así lo conciban también otros legisladores.

Por mi parte, estoy convencido que el Presidente debe tener el derecho de asistir, hablar y que le sean hechas las preguntas necesarias a las cuales él pueda responder. Esto vendría a modernizar el ejercicio de rendición de cuentas.

P.- Preguntarle, ¿en el próximo periodo ordinario --como se dice por ahí, hablando en plata-- realmente usted considera que estén dadas las condiciones para aprobar las grandes reformas que han quedado pendientes durante todos estos periodos ordinarios? Y le pregunto esto, porque por ejemplo, en el caso del PRD dicen que en el Congreso hay dos bandos: los bloqueadores y los reformadores. Y que los bloqueadores en gran parte están en su partido, en la Cámara de Diputados. ¿Cuál es su lectura, senador?

R.- Hablando en “plata” es una oportunidad de oro la que tenemos, de poder terminar de construir lo que es una reforma política tan necesaria para el país, el darle al paquete económico una nueva dimensión, procurando hacer una reforma hacendaria, como la que hemos propuesto, y también el de poder llevar a cabo lo que es el voto para tener órganos reguladores verdaderamente independientes de la economía.

Por nuestra parte, contar también con una Ley de Seguridad Nacional que, insisto, convine lo que parece difícil: salvaguardar los derechos humanos y las garantías individuales, como también las facultades precisas y legales que deberán tener las Fuerzas Armadas que han salido en apoyo de las fuerzas civiles para combatir a la delincuencia.

Éstos, como muchos otros temas, estoy seguro que serán desahogados con un espíritu reformador, tanto en la Cámara de Senadores, como en la Cámara de Diputados, de todos los grupos parlamentarios, que están conscientes de las situación tan delicada por la que pasamos en México.

P.- ¿En su partido no hay bloqueadores?

R.- No. Yo pienso que en mi partido son más los reformadores, que aquellos que piensan que las cosas están bien como hoy suceden, no obstante que nos sintamos tan mal.

Muchas gracias.

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