* Versión de la intervención de la senadora Gabriela Cuevas Barron, en la ceremonia de inauguración de la Semana Cultural Alemana, en el marco del Año Dual Alemania-México
Senador Luis Sánchez Jiménez, vicepresidente de la Mesa Directiva del Senado de la República; excelentísimo embajador Viktor Elbling, embajador de la República Federal de Alemania en nuestro país; amigo Fernando Torres Graciano; y por supuesto a nuestro anfitrión, a quien agradezco esta invitación y por supuesto siempre la oportunidad de trabajar juntos, al senador Rabindranath Salazar Solorio, presidente de la Comisión de Relaciones Exteriores-Europa
Muy buenos días a todas, a todos, bienvenidos a este Senado de la República.
Señor embajador, como siempre, bienvenido al Senado, nos da mucho gusto seguir trabajando en las distintas comisiones, muy cerca de la Embajada alemana.
El día de hoy la Comisión de Relaciones Exteriores-Europa nos invita a presenciar tres exposiciones provenientes de Alemania, y con ello celebrar esta semana dual en el Senado de la República.
Alemania, uno precisamente de los socios más importantes para México y hoy más que nunca fundamental en la coyuntura internacional que estamos viviendo.
Al pensar en Alemania diversas imágenes son evocadas. Por un lado, el aspecto tradicional de sus monumentos y lugares turísticos, como la Puerta de Brandenburgo, el edificio del Reichstag o sus grandes palacios y pueblos medievales, que conviven con la modernidad de una nación buyante y desarrollada.
De igual forma viene a la mente su papel como potencia global. Al tratarse de la cuarta economía del mundo, con 82 millones de residentes que la convierten en el país más poblado de Europa, la magnitud de sus decisiones resuena con mayor voz, no sólo en Europa, sino también en todo el mundo.
Y en este contexto es importante destacar a una de las mujeres más influyentes del mundo, a la canciller Angela Merkel, cuyo liderazgo es conocido por todos por cómo ha proyectado a su país como líder ante Europa, pero también ha logrado encabezar el proyecto de la Unión Europea ante el mundo.
La canciller ha sido una de las voces más importantes en la agenda humanitaria y global, una agenda que hoy se cuestiona en el mundo, donde los nacionalismos buscan aplastar a los refugiados y a los migrantes y la experiencia alemana es precisamente la voz que logra conjugar esa agenda humanitaria con la eficiencia en los procesos de acogida y en lograr una sociedad cada vez más incluyente.
La República Federal de Alemania es un país cuyo magnetismo traspasa fronteras y rebasa el aspecto turístico. Ubicada geográficamente en el corazón de Europa, es una potencia comercial, es el tercer exportador a nivel mundial, y una potencia tecnológica, un lugar atractivo para la investigación.
En Alemania se invierte cerca del 3 por ciento del Producto Interno Bruto en investigación, y además, la estructura pluricultural de su población, en la cual una quinta parte tiene raíces extranjeras, alrededor de 17 millones personas, ha logrado una visión de apertura e integración a la migración.
Estos elementos en su conjunto son definitorios de la Alemania de hoy, nos invitan a analizar las razones de su éxito. En este sentido, las muestras culturales nos permiten reconocer fácilmente las similitudes con el otro y propicia el querer acercarnos, para lograr un mayor acercamiento entre las naciones.
En el caso de la relación entre México y Alemania, el aspecto cultural ha favorecido la aparición de fascinaciones mutuas. Ya lo comentaba el senador Rabindranath Salazar, Alexander von Humboldt en sus reportes de viajes presentó su visión y encanto por México. A su vez, la influencia alemana ha llegado a México a través de personas que han aportado a la definición cultural de este país. Entre ellos podemos contar a uno de los más grandes coleccionistas y filántropos, Franz Mayer, al escultor Mathias Goeritz y, por supuesto, a una de las pintoras más famosas con ascendencia alemana: Frida Kahlo.
Las muestras de interés persisten en el cada vez mayor número de mexicanos aprendiendo el idioma, en donde el instituto Goethe presenta un aumento récord de inscripciones. Otro aspecto que evidencia la cercanía e interés es que se cuenta con la mayor interconectividad aérea, es Alemania el país europeo con el que México tiene mayor número de vuelos directos, y esta cercanía ha beneficiado los intercambios económicos; Alemania se ha convertido en el principal socio para México dentro de la Unión Europea y en la tercera fuente de inversión en nuestro país, destinada principalmente a los sectores automotriz, químico, farmacéutico, y electrónico.
Bajo estas premisas surge el Año Dual como un esfuerzo bilateral para continuar buscando valores compartidos y acercar a nuestras sociedades. También, con este proyecto conjunto estamos materializando uno de los propósitos que han enmarcado nuestra relación desde el nuevo milenio: lograr una cooperación más intensa y duradera.
Las exposiciones que llegan de visita al Senado, en el marco de este año, personifican diversidad y evolución, valores que caracterizan a la sociedad alemana y que necesitan ser replicados en el mundo ante el aislacionismo que se ha estado gestando en el último año.
En primer lugar, una muestra fotográfica nos remitirá al pasado; seguido de una “startup” innovadora que hace uso de la tecnología para el entretenimiento y, finalmente, una maleta que contiene una serie de elementos representativos de Alemania.
El viaje fotográfico de Stefan Koppelkamm, mostrando a través de su lente el cambio en las calles de Berlín Oriental tras la caída del Muro divisorio ineludiblemente, harán pensar en la carga histórica de la ciudad de Berlín, la cual, a más de 25 años de conseguir una de las reunificaciones más fluidas y exitosas en el mundo, hoy se posiciona como una de las ciudades líderes en Europa, como un atractivo “hub” tecnológico, empresarial y cultural, que, además, nos demuestra que ningún muro trae resultados positivos para la ciudad, para los países o incluso para la humanidad.
En este nuevo escenario, surgió Teledisko, la discoteca más pequeña del mundo, la cual es una “startup” que vende experiencias. Es gracias a la participación del 47.7 por ciento de la población económicamente activa en el sector conocimiento y tecnología, que pueden nacer iniciativas como las que disfrutaremos el día de hoy.
Por último, “Alemania en una maleta” ofrece los elementos más representativos de la cultura alemana. Me parece impresionante el intentar descubrir en una caja, de grandes dimensiones, la riqueza y vastedad encontrados en los 357 mil kilómetros de extensión de Alemania, y disfrutaremos de ese ejercicio.
Señor embajador, compañeros senadores, celebro esta iniciativa, en la que la pequeña muestra del día de hoy nos dejará con muchas ganas de conocer más de Alemania. Espero que el interés por colaborar y dialogar traiga nuevos proyectos pronto.
Muchas felicidades, amigo Rabindranath Salazar, embajador Viktor Elbling, muchas felicidades por este esfuerzo, enhorabuena y que sea una semana llena de éxitos en esta Semana Dual México-Alemania, en el Senado de la República. Felicidades.
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