* Mensaje del senador Emilio Gamboa Patrón, coordinador del grupo parlamentario del PRI, en el Seminario “El Federalismo Constitucionalista Mexicano: propuestas y conclusiones” e inauguración de la exposición “El Universal: 100 años en la vida de México”, en instalaciones del Senado de la República, el martes 21 de febrero de 2017.

Con su permiso, señor presidente de la Mesa Directiva;

Señor presidente de la Junta de Coordinación Política del Senado de la República;

Señores coordinadores;

Señora vicepresidenta;

Señor vicepresidente;

Señoras secretarias de la Mesa Directiva;

Saludo con mucho afecto a mis compañeras y compañeros senadores en un día tan especial:

Para mí es un privilegio estar el día de hoy y darle la más cordial bienvenida a un amigo del Senado, un hombre que entiende la pluralidad, entiende la vivencia de la democracia en nuestro país, como viene evolucionando a través del tiempo y cómo lo ha plasmado el gran periódico nacional: El Universal.

Saludo al presidente ejecutivo y presidente del Consejo de Administración de El Universal, mi amigo Juan Francisco Ealy Ortiz; al director del periódico, Juan Francisco Ealy Lanz Duret; a todos los colaboradores de El Universal. Les aplaudo de verdad, con sinceridad, el trabajo que vienen desarrollando.

Se dice fácil que un periódico pueda durar 100 años; pero, este periódico ya no es sólo un periódico, es una institución en nuestro país y eso es lo que tiene que hacer un hombre con visión, como Juan Francisco Ealy Ortiz, viendo, imprimiendo la pluralidad y esa democracia, cuando el primer gran periódico de México, le dio la oportunidad a la izquierda, a la derecha, cuando había un gobierno hegemónico.

Hoy, aquí lo aplaudimos, señor presidente ejecutivo; aquí hay coordinadores de todos los partidos, aquí está la pluralidad de 128 compañeras y compañeros senadores, que trabajamos todos los días arduamente para modificar la Constitución, no para dejarla igual.

Dejarla igual sería el peor error que pudiéramos haber hecho en la LXII y en la LXIII Legislaturas.

El mundo ha cambiado y no reconocer esto, sería verdaderamente catastrófico.

En el Senado, en la LXII y en la LXIII Legislaturas -lo puedo decir abiertamente en esta tribuna-, va a ser sin duda alguna de las legislaturas más reconocidas por los cambios de fondo que van a transformar y van a mejorar a México.

Tener aquí la presencia de un gran funcionario, de un hombre que le ha servido a México, que le sirvió a su universidad, a la UNAM; un hombre como Juan Ramón de la Fuente, nos distingue mucho -Juan Ramón- tu presencia.

Y escuchar a un gran amigo, a Ricardo Raphael de la Madrid, estudioso, buen periodista, juicioso, que nos habla que participaron seis magníficas academias en el proceso de este seminario y que hay siete conclusiones, y las dijo muy breves, pero muy concretas.

¿Qué es lo que nos queda? Trabajar ese documento, analizarlo, discutirlo, debatirlo, traerlo al pleno del Senado. Y si enriquece la Constitución -como estoy convencido por las palabras de Ricardo Raphael de la Madrid-, van a ver ustedes que el Senado sigue trabajando.

Qué bueno que la sociedad mexicana, que la sociedad civil, que los académicos, que los estudiosos, que los periodistas nos puedan ayudar y darnos insumos para poder modificar nuestra Carta Magna.

Hace 15 días -5 de febrero- se celebraron los 100 años de la Constitución. Yo, como ciudadano, como senador de la República, me siento muy honrado de un documento que tiene la guía que debemos seguir cualquier ciudadana o ciudadano en este país.

Un seminario que pudieron hacer y este compendio enorme que se le entregó al presidente de la Mesa Directiva, nos hace reflexionar a los coordinadores sobre qué sigue. Y sigue un seguir muy unidos.

México es un gran país y ni es la primera crisis que estamos pasando, ni será la última; pero, vamos a salir adelante.

Recuerdo bien la frase de un gran Presidente, como fue Miguel de la Madrid, cuando dijo “no permitiré que este país se me deshaga entre las manos”.

Imagínense lo que sentía el Presidente en ese momento, un país en crisis, un país que tenía posibilidades de dividirse y pudimos salir adelante.

Hoy más que nunca, por nuestros hijos, por nuestros nietos, trabajemos en el Senado de la República como lo hemos hecho, y trabajemos al lado de la sociedad mexicana y con hombres tan talentosos y como grandes mexicanos, que es la familia Ealy Ortiz.

Muchísimas gracias.

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