En el Senado trabajamos para lograr que la Ley General de Víctimas tenga viabilidad y responda al objetivo de su creación, la reparación del daño a víctimas, sus familiares y víctimas sobrevivientes, señaló la senadora Angélica de la Peña Gómez al referirse al proceso de selección de los integrantes de la Comisión Ejecutiva de Atención a Víctimas.
Los legisladores señalamos la importancia de que la ley fuera plausible y efectiva, justamente para garantizar que aquellas personas que por diversas situaciones desconocen todavía la verdad  respecto a hechos que ha sufrido, tuvieran algún alivio, aunque no fuera el deseado o el que debiera garantizar el Estado, indicó la legisladora.
“El debate en torno a la integración de la Comisión Ejecutiva fue arduo, es verdad que hubo algunas dificultades, hubo planteamientos diversos, sin embargo por la necesidad de ponerla en funcionamiento, optamos por modificar la ley, no la Constitución”, señaló de la Peña Gómez.
Dijo que se concretó uno de los mecanismos mas importantes para que la  Ley General de Atención y Protección a las Víctima sea aplicable: la  elección de los integrantes de la Comisión Ejecutiva  del Sistema Nacional de Atención a Victimas.
Cada una de las siete personalidades surgidas del dictamen propuesto por las comisiones de Justicia y Gobernación, asegura De la Peña Gómez, se caracterizan por una notable trayectoria en la academia, la militancia y el activismo, y cumplen ampliamente los requisitos planteados por la ley.
Resaltó que la Comisión Ejecutiva llevará a cabo las tareas necesarias a fin de que la ley se cumpla cabalmente en todos sus términos, de tal manera que dé respuesta a las justas demandas de cada una de las victimas sobrevivientes y familiares de las victimas que han perdido la vida o están desaparecidas.
Para finalizar, la Presidenta de la Comisión de Derechos Humanos del Senado enfatizó que “en el Congreso estamos haciendo lo correcto  para buscar la paz en nuestro país, para cerrar las heridas que tenemos abiertas,  para coadyuvar en la tranquilidad que por  desgracia no encontramos en muchos lugares de nuestra nación”.
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