·  Propone que partidos establezcan una cuota de 20 por ciento de candidaturas para los jóvenes

La senadora Andrea García García presentó una iniciativa de reformas a la Constitución, para garantizar el acceso de la juventud a cargos de elección popular y otra que reforma la Ley General de Instituciones y Procedimientos Electorales, con el fin de establecer una cuota de 20 por ciento de candidaturas a diputados locales y federales para los jóvenes.

Ambas propuestas, explicó García García, buscan que los jóvenes tengan la oportunidad de participar en el Congreso de la Unión como legisladores y, con ello, que su voz sea escuchada en el parlamento y en el gobierno.

Refirió que sólo el cinco por ciento de los integrantes del Congreso de la Unión son jóvenes, lo que equivale únicamente a 25 curules.

Indicó que más del 50 por ciento de la población es joven y es esta generación la que puede ofrecer ideas, alternativas y nuevas prácticas políticas, para que la corrupción deje de ser un problema que afecte al país.

Afirmó que se necesita “debilitar los estereotipos que tratan a la gente joven como desinteresada en temas políticos; mujeres y hombres de entre 20 y 29 años de edad participan menos que los adultos en los comicios de nuestro país, pero es debido a la falta de confianza que tienen en sus gobernantes”.

García García señaló que se debe considerar a los jóvenes no como el futuro del país, sino como agentes potenciales de cambio, que son parte de la solución.

La legisladora propuso reformar el artículo 41 de la Constitución Política para establecer que “los partidos políticos tienen como fin (…) contribuir a la integración de los órganos de representación política (…) mediante el sufragio universal, libre, secreto y directo, así como las reglas para garantizar la paridad entre los géneros y la participación de la juventud en candidaturas a legisladores federales y locales”.

Asimismo, propuso reformar diversos artículos de la Ley General de Instituciones y Procedimientos Electorales para establecer que “es derecho de los ciudadanos y obligación para los partidos políticos la igualdad de oportunidades, la paridad entre hombres y mujeres y garantizar el 20 por ciento de la participación de la juventud, para tener acceso a cargos de elección popular”.

Establece también la obligación del Instituto Nacional Electoral y de los Organismos Públicos Locales de “vigilar que se cumpla con el 20 por ciento de la participación de la juventud en la postulación de candidatos a los cargos de elección popular para la integración del Congreso de la Unión, los Congresos de los Estados y la Asamblea Legislativa del Distrito Federal”.

La iniciativa que plantea reformar la Constitución se turnó a las comisiones unidas de Puntos Constitucionales, de Juventud y Deporte y de Estudios Legislativos Primera, y la iniciativa que reforma la Ley General de Instituciones y Procedimientos Electorales se turnó a las comisiones unidas de Juventud y Deporte y de Estudios Legislativos Primera para su análisis y dictamen.

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22 de marzo de 2017

* Versión de la intervención en tribuna de la senadora Andrea García García, al presentar una iniciativa con proyecto de decreto por el que se reforma la Constitución Política de los Estados Unidos Mexicanos y otra que reforma la Ley General de Instituciones y Procedimientos Electorales

Compañeras y compañeros senadores.

Hoy quiero compartir con todos Ustedes mi compromiso con la juventud, la adolescencia y la infancia de nuestro país, por ello vengo a proponer una reforma con la cual busco que las y los jóvenes tengan la oportunidad de participar en el Congreso de la Unión como legislador o legisladora.

Lo anterior implica que consideremos a los jóvenes no como el futuro de nuestro país, sino como agentes potenciales de cambio que son parte de la solución y no como un problema a ser resuelto por otros.

Como Senadora, mi deber y compromiso es lograr que se escuchen las voces de la juventud en el parlamento y en el gobierno, debilitar los estereotipos que tratan a la gente joven como desinteresada en temas políticos, porque es cierto que mujeres y hombres de entre 20 y 29 años de edad, participan menos que los adultos en los comicios de nuestro país, pero ello es debido a la falta de confianza que tienen en sus gobernantes.

Es urgente que se implementen medidas específicas, de acuerdo al contexto general, que empodere a la juventud para que participe en la vida cívica de nuestro país.

En armonía con ello la Organización de las Naciones Unidas (ONU), ha tenido el firme propósito de impulsar el reconocimiento de los derechos y las aspiraciones de la juventud, justo en un ambiente donde este grupo se muestra apático y desinteresado de las decisiones de los gobiernos porque no cree en los partidos políticos, y a la vez los líderes partidarios se quejan a menudo, que lo jóvenes no se quieren involucrar.

Ban Ki-moon, secretario general de las Naciones Unidas, en el Día Internacional de la Democracia, en 2014, envió su mensaje directamente a la población juvenil, “a hacer frente a los desafíos y considerar lo que está a su alcance para resolverlos; asumir el control de su destino y traducir sus sueños en un futuro mejor para todos; contribuir a la construcción de sociedades democráticas mejores y más fuertes; trabajar de común acuerdo para utilizar su pensamiento creativo y convertirse en arquitectos de un futuro en que nadie quede postergado”.

Lo anterior es relevante, ya que en México --a la fecha-- sólo se promueven los Parlamentos Juveniles e Infantiles, que son simulaciones, y tan es así, que los participantes del Décimo Parlamento Infantil, llevado a cabo en febrero, comentaron durante los debates, ¿de qué sirve todo esto, si nuestras propuestas no se van a llevar a cabo?

Y es justo en ese momento, con esas palabras, que nuestras niñas y niños empiezan a desilusionarse del sistema, pierden la confianza y dejan de creer en las autoridades, aún antes de convertirse en la mayoría de edad.

Es para estas generaciones jóvenes, que están llenas de motivos para trabajar por nuestro país, que busco que en armonía con la tendencia internacional, impulsemos y garanticemos su participación en el Congreso de la Unión.

La preparación de esta Iniciativa me llevó a conocer que sólo el 5 por ciento de la Cámara de Diputados está integrado por jóvenes, lo que equivale a 25 lugares, cuando nuestra población hoy en su mayoría es joven, siendo el 23 por ciento conformada por personas de entre 20 y 29 años de edad y el 36 por ciento va desde los 0 a los 19 años de edad.

Es decir más del 50 por ciento de nuestra gente es joven, y son estas generaciones las que pueden ofrecer muchas ideas y alternativas pero sobre todo, nuevas prácticas, donde la corrupción deje de ser la protagonista en nuestro país.

En el mismo tenor, estadísticas de la Cámara de Diputados, sobre la LXIII Legislatura, destacan que siete de cada 10 legisladores, no cuentan con experiencia en las tareas del Poder Legislativo, así que si preguntan si los jóvenes podemos con esta gran responsabilidad, yo digo con toda la confianza que sí, sí podemos con esta gran y honorable tarea de legislar a favor de nuestro México, mucha gente cree que la juventud no puede ser importante, seria y competente.

Por ello, a través de una reforma constitucional y a la Ley de General de Instituciones y Procedimientos Electorales, es que reafirmo mi compromiso con la juventud, la adolescencia y la infancia de nuestro país, para luchar por sus derechos y lograr que su talento se reconozca y promueva el desarrollo de México y de nuestra población que tanto lo necesita.

Nelson Mandela dijo: “El futuro de una Nación, es tan prometedor como la próxima generación de ciudadanos.”  Y por ello es tan importante que sentemos las bases que les permitan a nuestros jóvenes y a nuestros niños y niñas, como los que vinieron al Parlamento Infantil, para que recobren la esperanza de un país prometedor, de un país que los escucha y de un país que quiere crecer con ellos.

Por ello hago dos propuestas:

La primera, que reforma el artículo 41, fracción primera párrafo segundo de la Constitución Mexicana para quedar como sigue:

1.Los partidos políticos tienen como fin promover la participación del pueblo en la vida democrática, contribuir a la integración de los órganos de representación política y como organizaciones de ciudadanos, hacer posible el acceso de éstos al ejercicio del poder público, de acuerdo con los programas, principios e ideas que postulan y mediante el sufragio universal, libre, secreto y directo, así como las reglas para garantizar la paridad entre los géneros y participación de la juventud en candidaturas a legisladores federales y locales. Sólo los ciudadanos podrán formar partidos políticos y afiliarse libre e individualmente a ellos; por tanto, quedan prohibidas la intervención de organizaciones gremiales o con objeto social diferente en la creación de partidos y cualquier forma de afiliación corporativa”.

La segunda propuesta, reforma la Ley General de Instituciones y Procedimientos Electorales, para quedar como sigue:

Artículo 7.

Numeral 1. Votar en las elecciones constituye un derecho y una obligación que se ejerce para integrar órganos del Estado de elección popular. También es derecho de los Ciudadanos y obligación para los partidos políticos la igualdad de oportunidades, la paridad entre hombres y mujeres y garantizar el 20 por ciento de la participación de la juventud, para tener acceso a cargos de elección popular.

Artículo 232.

Numeral 3. Los partidos políticos promoverán y garantizarán la paridad entre los géneros y la participación de la juventud en la postulación de candidatos a los cargos de elección popular para la integración del Congreso de la Unión, los Congresos de los Estados y la Asamblea Legislativa del Distrito Federal.

Numeral 4. El Instituto y los Organismos Públicos Locales, en el ámbito de sus competencias, tendrán facultades para rechazar el registro del número de candidaturas de un género que exceda la paridad, fijando al partido un plazo improrrogable para la sustitución de las mismas. Así mismo deberá vigilar que se cumpla con el 20% de la participación de la juventud en la postulación de candidatos a los cargos de elección popular para la integración del Congreso de la Unión, los Congresos de los Estados y la Asamblea Legislativa del Distrito Federal. En caso de que no sean sustituidas no se aceptarán dichos registros.

Artículo 233.

Numerla 1. De la totalidad de solicitudes de registro, tanto de las candidaturas a diputados como de senadores que presenten los partidos políticos o las coaliciones ante el Instituto, deberán integrarse salvaguardando la paridad entre los géneros y la participación de la juventud, mandatadas en la Constitución y en esta Ley.

Artículo 241.

Numeral 1. Para la sustitución de candidatos, los partidos políticos y coaliciones lo solicitarán por escrito al Consejo General, observando las siguientes disposiciones:

a)            Dentro del plazo establecido para el registro de candidatos podrán sustituirlos libremente, debiendo observar las reglas y el principio de paridad entre los géneros y participación de la juventud, establecidos en el párrafo 3 del artículo 232 de esta ley.

Ahora bien, quiero finalizar citando a Kofi Annan, séptimo Secretario General de las Naciones Unidas: “Nadie nace buen ciudadano; ninguna Nación nace democracia, más bien, ambos son procesos que continúan su evolución de por vida. Los jóvenes deben ser incluidos desde que nacen. Una sociedad que se desliga de su juventud, cercena su sustento; está condenada a morir desangrada”.

Es cuanto, señor Presidente.

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