Número-356

  • Senadores y diputados manifestaron su preocupación por la crisis que vive el pueblo venezolano y se pronunciaron por el diálogo para dar solución a los conflictos. 

 

La Comisión Permanente del Congreso consideró que los resultados de la elección de la Asamblea Nacional Constituyente de la República Bolivariana de Venezuela, celebrada el pasado domingo 30 de julio, no cumplieron con los requisitos constitucionales establecidos en aquel país y representan un instrumento para la desarticulación del Estado venezolano y su democracia.

 

El Presidente de la Mesa Directiva de la Comisión Permanente, Pablo Escudero Morales, dio lectura al pronunciamiento, y agregó que dicha elección, además, se desarrolló en medio de una cruda represión que provocó la muerte de 16 personas.

 

Expresó la preocupación de los legisladores por la revocación del arresto domiciliario de Leopoldo López y Antonio Ledezma, líderes de la oposición, por parte del Tribunal Supremo de Justicia de la República Bolivariana de Venezuela, al suponer una violación a sus derechos civiles y políticos, que al mismo tiempo profundiza la crisis política que vive ese país.

 

Exhortó al Gobierno Federal, a través de las dependencias competentes, a tener en cuenta la difícil situación humanitaria que enfrenta el pueblo venezolano y se evalúen las solicitudes de refugio y protección complementaria que se reciban.

 

En el debate sobre el tema, el diputado Jesús Rafael Méndez Salas, del PANAL, se pronunció por que se privilegie el diálogo y la concordia, se facilite la libre manifestación de las ideas y se busque la paz entre los distintos actores políticos al interior de Venezuela.

 

Como parlamentarios nos corresponde hablar de la vigencia de la democracia y del respeto a los derechos fundamentales, aseguró el diputado Macedonio Tamez Guajardo, de Nueva Alianza;  son dos conceptos que están en peligro en Venezuela, apuntó.

 

El diputado de Morena, Vidal Llerenas Morales, dijo que no se debe impulsar una posición que viole los principios de la política exterior mexicana, sino que es fundamental fortalecer el diálogo, la conciliación y el encuentro con Venezuela.

 

El diputado del PVEM, Emilio Enrique Salazar Farías, aseguró que en Venezuela hay una gran crisis personal, porque la gente no tiene medicinas, alimentos y “existe un grito permanente por ayuda internacional”.

 

El senador Miguel Barbosa Huerta dijo que la lucha del pueblo venezolano es auténtica, pues se busca la democracia, libertades y derechos humanos, pero detrás de este movimiento, hay intereses económicos y políticos perversos.

 

La senadora Dolores Padierna Luna, del PRD, calificó de inadmisible que el Gobierno mexicano esté más preocupado en intervenir en asuntos internos de un país hermano que en resolver la grave crisis de derechos humanos propia, y destacó que la Cancillería mexicana tomó una posición de hostilidad que no abona a reestablecer la situación delicada de crisis institucional.

 

La senadora del PAN, Mariana Gómez del Campo Gurza, dijo que se deben desconocer los resultados de la elección de la Asamblea Nacional Constituyente de Venezuela, celebrada el 30 de julio, “ya que no cumplió con los requisitos constitucionales establecidos en aquel país”.

 

 El senador del PRI,  José Marco Antonio Olvera Acevedo, advirtió que es un momento crítico para la población de este país, que se ha visto fuertemente afectada por el desabasto de productos básicos, medicamentos, la inflación, pobreza, violencia y una descomposición del tejido social cada vez más sensible.

 

Para hechos, intervinieron David Monreal Ávila, Juan Carlos Romero Hicks, Vidal Llerenas Morales, Mariana Gómez del Campo Gurza, Miguel Barbosa Huerta y Maricela Contreras Julián.