Senado de la República

COORDINACIÓN DE COMUNICACIÓN SOCIAL


alt• Se llegará a una dictaminación objetiva y puntual, asegura PRI
• Se busca el perfeccionamiento de la democracia y certidumbre en las elecciones: PAN
• Para PRD la centralización de elecciones es una falsa solución
Ante senadores de las diversas fracciones parlamentarias, titulares de los institutos electorales estatales se manifestaron en contra de la creación Instituto Nacional de Elecciones (INE), pues sus funciones podrían resultar “azarosas”, además de que no resolvería los problemas de la democracia mexicana.
Lo anterior, durante una reunión que sostuvieron con las comisiones unidas de Puntos Constitucionales, Gobernación, Reforma del Estado y de Estudios Legislativos Segunda como parte del análisis de las iniciativas en torno a la reforma política-electoral.
El senador Enrique Burgos García, titular de la Comisión de Puntos Constitucionales, aclaró que esta reunión no se trata de un debate sino de escuchar los puntos de vista de los consejeros electorales respecto a las propuestas de reforma en materia político electoral.
Indicó que el tema central de la reunión es la creación del Instituto Nacional de Elecciones (INE), que supliría las funciones del Instituto Federal Electoral, además de la desaparición de los órganos electorales locales.
Al respecto, Diana Talavera Flores, consejera presidenta del Instituto Electoral del Distrito Federal, aseguró que la propuesta de distintas fuerzas políticas para crear el Instituto Nacional de Elecciones no resuelve los problemas de fondo de la democracia mexicana.
Pero, dijo, “nos pronunciamos de manera firme a favor de la discusión y deliberación seria, profunda e incluyente en torno a propuestas que apuesten por el respeto y consolidación del federalismo electoral y por el fortalecimiento de los órganos electorales locales”, puntualizó.
Al leer un manifiesto firmado por los presidentes de los organismos electorales estatales, señaló que la solución no es desaparecer las instituciones locales en esta materia, sino dotarlas de fortalezas que les permitan una auténtica autonomía, especialmente la presupuestal.
Consideró desmesurado que se pretenda responsabilizar de esos problemas a algunos órganos electorales locales “por su supuesta falta de autonomía”.
Es evidente --destacó-- que las consecuencias para la democracia mexicana al concentrar las funciones de todos los organismos electorales estatales en un solo órgano resultarán por lo menos “azarosas”.
Indicó que la creación del INE conllevaría destinar a este nuevo órgano un presupuesto sustancialmente mayor al ejercido actualmente por el Instituto Federal Electoral, ya que tendría que organizar más de 8 mil elecciones en seis años, sin considerar lo relativo al registro de nuevos partidos políticos nacionales y locales, prerrogativas, fiscalización, regulación de precampañas y campañas, entre otras tareas.
Por ello, Talavera Flores expresó que la reforma no debe anular la estructura electoral federalista, pero sí fortalecer los organismos locales tal y como lo han expresado especialistas en la materia.
En este sentido, propuso fortalecer a los institutos electorales locales mediante el establecimiento de reglas y principios, adecuación y homologación de mecanismos de elegibilidad de consejeros, independencia presupuestal, así como incorporar el servicio electoral profesional.
Por parte del Instituto Estatal Electoral de Sinaloa, Jacinto Pérez expresó que las prácticas irregulares que aún se presentan en las elecciones no se llevan a cabo por las autoridades electorales, “ya que ustedes han diseñado un sistema que impide que estas autoridades incurran en prácticas fraudulentas”.
Argumentó que en las iniciativas se establece que los cargos dentro de los órganos electorales se otorgan en función de cuotas partidistas, por tal motivo, “el mal” no está en estos órganos, sino en el sistema de selección y la falta de auto contención de los partidos políticos “y mientras no se exprese alguien respecto de la legislación secundaria, no tendremos la certeza de que la reforma va a funcionar”.
Del Instituto Electoral de Durango, Javier Mier precisó que el presupuesto para los institutos ascendió a cuatro mil 747 millones de pesos y realizan un 600 por ciento más de trabajo que la autoridad federal y menor costo, “por lo que no coincidimos en la totalidad de los puntos de las iniciativas, aún cuando reconocemos que no somos instituciones perfectas, pero si perfectibles”.
Manifestó que el Congreso debe tomar la mejor decisión para el fortalecimiento del pacto federal, porque “lo que necesita la sociedad mexicana son autoridades con solvencia moral, que tengan la sensibilidad del ciudadano para otorgar el privilegio de contar con un voto e instituciones que lo defiendan”.
El presidente del Instituto Electoral de Chihuahua Fernando Herrera, aseguró que la creación del Instituto Nacional de Elecciones, es un golpe al pacto federal; “no se entiende cómo quienes representan este pacto, pudieran atreverse a votar una medida regresiva, centralista y atentatoria contra la esencia de nuestra nación”.
“Este Senado no debió permitir que una entidad federativa tuviera más senadores que otra, ya que debe ser igualitaria, pues el federalismo está en esta casa”.
A su vez, Leticia Catalina Soto Acosta, de Zacatecas, señaló que la reforma debe responder a necesidades de la ciudadanía, por lo que se tienen que revisar temas como la participación ciudadana en procesos de participación antes “vetados”, el impulso a la inclusión política de mujeres, así como de incluir a indígenas y jóvenes.
“Si a todas las instituciones de este país se les exigiera el mismo nivel de transparencia y eficiencia que a los órganos electorales, México sería diferente” porque somos instituciones altamente vigiladas por los partidos políticos y la sociedad. Por ello, solicitó que la reforma responda a estas exigencias de la ciudadanía, que limite libertad configurativa de las legislaturas estatales y que se abra una discusión amplia, que se parta de un diagnóstico puntual.
Al tomar la palabra, la presidenta de la Comisión de Gobernación, María Cristina Díaz Salazar sostuvo que los legisladores tienen el compromiso de buscar el entendimiento y la construcción de los acuerdos y consensos necesarios para llegar a dictaminar un solo propósito, pues “estamos comprometidos a perfeccionar nuestra democracia y considerar la posibilidad de las iniciativas troncales”.
Afirmó que dentro de la modernización de la democracia se encuentra la participación de las mujeres, ya que no se puede hablar de una base sin ellas, por lo que dijo que hay seis iniciativas en comisiones que buscan sumarse a la que presentó el Ejecutivo, con el objeto de cumplir con la paridad, “que es un tema de justicia para las mujeres”.
Aseguró que llevarán a cabo un análisis exhaustivo para llegar a una dictaminación objetiva y puntual, que represente los anhelos de los ciudadanos y la sociedad y donde también se les podría dar mayores atributos en contrapeso, tanto al Instituto Federal Electoral como a los organismos estatales.
“Sus expresiones nos motivan a atender y analizar con puntualidad cada uno de los planteamientos, pues es un tema de gran trascendencia para la modernización de nuestra sociedad”.
Por su parte, el senador secretario de la Comisión de Reforma del Estado, José María Martínez Martínez, del PAN, puntualizó que lo que pasa con los Institutos Electorales locales no es una desmesura como lo afirmó Jacinto Pérez y Diana Talavera, porque es únicamente una propuesta, sólo es para abrir el diálogo y la discusión.
Aclaró que su partido ha señalado que “no debemos aferrarnos, jamás, bajo ninguna circunstancia a los irreductibles”, su propuesta abre el diálogo y discusión y no se centra en temas de “patria o muerte”.
Destacó que las conclusiones a las que llegó luego de su participación en la comisión encargada de seguimiento a los procesos se electorales de este año, se incluyeron en la exposición de motivos y consideraciones de la iniciativa; “hablamos de plena subordinación a los gobiernos en turno, de relaciones cercanas, incluso partidarias”.
“Necesitamos generar confianza a los mexicanos, no nada más que se sepa contar el voto sino que se traduzca en eficiencia para quien va gobernar. No podemos soslayar una propuesta a la luz de una defensa de un federalismo, porque tampoco se reduce el debate a ello”, acotó.
En su turno, el senador perredista Alejandro Encinas Rodríguez, presidente de la Comisión de Estudios Legislativos, Segunda, manifestó su posición en contra de la creación de un Instituto Nacional de Elecciones y una Ley Nacional Electoral, “por una convicción personal”.
El debate, dijo, se inició mal, pues en lugar de pensar en fortalecer la autonomía de los órganos electorales de los estados, se buscan culpables y responsables de problemas que existen en las entidades, tratando de atraer de manera centralizada la falsa solución a dichos problemas, argumentó.
Agregó que el problema no es exclusivo, no es problema de injerencia de los gobernadores en la integración de los órganos electorales, sino de complicidad de los partidos y de grupos parlamentarios en los estados, como en el Estado de México en que el PRD y PAN, siendo mayoría entregaron el control del órgano al gobierno del Estado.
Al respecto, cuestionó ¿por qué seguir desmantelando las instituciones locales para volver a un proyecto de centralización que no va a garantizar ni más equidad ni más transparencia en las elecciones? Las prácticas de inequidad que se dan con relación a los programas sociales no se van a eliminar con la creación del instituto, es otra la naturaleza de la discusión, añadió.
En su oportunidad, el senador petista, Manuel Bartlett Díaz dijo que existe una “involución” del sistema electoral y la democracia, pues es “brutal” el dominio de los medios de comunicación y del dinero en las elecciones federales y locales.
Hizo notar que la solución a este problema no es la centralización, pues su complejidad es enorme y las reformas en esta materia no garantizan que se combata la dictadura de los medios de comunicación ni que se resuelva el papel que juega el dinero en las elecciones.
También del PRD, el senador Armando Ríos Piter expresó que se equivocan quienes piensan que construir un instituto nacional electoral es una forma de amarrarles las manos a los gobernadores, aun cuando el verdadero avance se debe dar al combatir la corrupción, opacidad y la falta de rendición de cuentas en los estados.
Para finalizar la reunión, la senadora panista María del Pilar Ortega Martínez, manifestó que lo que se busca con la reforma electoral es el perfeccionamiento de la democracia y dar certidumbre a todas las elecciones que se realizan en el país, a fin de que éstas cuenten con altos niveles de credibilidad.
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