Senadores integrantes de la Comisión de Fomento Económico y representantes de la industria automotriz se reunieron para abordar las preocupaciones del sector respecto a las diversas reformas que serán abordadas en el Congreso de la Unión, a fin de que con el compromiso de todas las partes, dicha industria continúe siendo uno de los pilares más importantes del crecimiento económico de nuestro país.

El senador José Ascención Orihuela Bárcenas afirmó que en la comisión que preside existe una verdadera preocupación porque las empresas mexicanas tengan éxito y se consolide la transformación de México. Empero, aseguró que para este fin es necesario crear nuevas condiciones en el marco jurídico para enfrentar los retos que tenemos como país en materia de economía y generación de empleo.

Guillermo Prieto Treviño, presidente Ejecutivo de la Asociación Mexicana de Distribuidores de Automotores (AMDA), aseguró que uno de los efectos más adversos para el mercado interno de la industria es, como lo propone el Ejecutivo Federal en su Reforma Hacendaria, reducir el monto deducible para la compra de automóviles de 175 a 130 mil pesos.

Por su parte, Miguel H. Elizalde Lizárraga, presidente Ejecutivo de la Asociación Nacional de Productores de Autobuses, Camiones y Tractocamiones (ANPACT), apuntó que la ley del IVA que obligaría a los fabricantes a pagar el impuesto en la aduana, de entrada significaría un costo financiero muy elevado.

No obstante, la senadora Marcela Guerra Castillo enfatizó que el impulso económico y la competitividad de la industria automotriz no dependen únicamente de los estímulos fiscales sino del compromiso de todas las partes para impulsar la productividad.

De esta manera, pidió crear una estrategia nacional de la industria en línea con el discurso del propio Secretario de Hacienda y Crédito Público para democratizar la productividad y generar todos los incentivos para este efecto, pero en la que la industria automovilística participe de manera concreta para impulsar el mercado externo y el mercado interno.

Para potenciar este último, propuso emprender acciones innovadoras como que el sector automovilístico produzca el carro del pueblo –al estilo Volkswagen Sedán-, en vez de que este provenga de China o India.

Sin embargo, Eduardo J. Solís Sánchez, presidente ejecutivo de la Asociación Mexicana de la Industria Automotriz (AMIA), aseveró que el sector no evade su responsabilidad, pero sí pide que no la incluyan en la exposición de motivos de la Reforma Hacendaria que habla de empresas que han cometido fraude.

Por otro lado, recordó que gracias a  la alianza del Gobierno Federal y del Poder Legislativo se han creado esquemas facilitadores del negocio que han permitido impulsar a la industria de tal manera que hoy en día México es el octavo fabricante de automóviles a nivel mundial y el cuarto exportador. “Por sus multiplicadores es una industria que hay que cuidarla y cuidarla bien,” dijo.

Sin embargo, el senador Benjamín Robles Montoya refirió que las políticas públicas que se han impulsado en el país a lo largo de los años a favor de la industria automotriz no pueden mantenerse ad infinitum. Después de todo, señaló, actualmente México se quiere transformar y para ello es necesario “jalar todos parejo”, de manera que el sector siga siendo un buen negocio para quienes participan en él, al tiempo que provea al país de los recursos y empleos necesarios.

En el mismo sentido, la senadora Juana Leticia Herrera Ale afirmó que  es necesario trabajar en coordinación estrecha para poder encontrar las alternativas que, sin contravenir el interés público, permitan que la industria automotriz siga siendo un pilar de la economía de nuestro país.

En el encuentro estuvo presente el senador Teófilo Torres Corzo y también participaron representantes de la Industria Nacional de Autopartes (INA) y de la Asociación Nacional de Comerciantes y Automóviles y Camiones Nuevos y Usados (ANCA).

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