La senadora María de los Ángeles Moreno dijo que en la capital del país es necesaria “una planeación inteligente, flexible y moderna, que permita evaluar resultados sobre el desarrollo urbano” y donde la seguridad pública y social se contemplen con el crecimiento poblacional y su inserción en la zona metropolitana del Valle de México.

La presidenta de la Comisión del Distrito Federal expresó que a pesar de las “ocurrencias” en materia de política urbana “es posible lograr el desarrollo sustentable, a fin de otorgar viabilidad a ciudades tan grandes como ésta, donde, sin duda, se están sobreexplotando los recursos”.

Al inaugurar el segundo Encuentro por el futuro de la Ciudad de México: La zona metropolitano del Valle de México, realizado en el Senado, destacó que los grandes centros urbanos son los que más producen contaminación.

Por ello, enfatizó la legisladora priista, “también tendremos que hacer un esfuerzo por la sustentabilidad y el abatimiento del calentamiento global que amenaza la vida de todos”.

En este sentido, dijo que el encuentro tiene el objetivo de escuchar a especialistas “para hacer reformas, que sean de verdadera utilidad, tengan un efecto permanente y contribuyan a desencadenar acciones en beneficio de los capitalinos”.

Por su parte, Arturo Aispuro Coronel, presidente del Colegio de Arquitectos de la Ciudad de México, se pronunció porque los foros se transformen en una tribuna permanente de la sociedad, donde se debata la conducción del Distrito Federal.

En el primer panel de discusión, Manuel Barclay Galindo, gerente general del Instituto Veracruzano de Desarrollo Urbano Regional y Vivienda, señaló que la gobernabilidad y la coordinación metropolitana son retos prioritarios del país que “no hemos sido capaces de enfrentar con éxito ni resolver”.

Dijo que es necesario invertir en infraestructura, equipamiento y servicios públicos para aumentar la movilidad social y de bienes, reducir o eliminar la contaminación, mejorar la administración y alcanzar reglamentos locales para una sana convivencia social; “sin estas condiciones, las ciudades se vuelven poco atractivas para los inversionistas”.

Por su parte, Francisco Covarrubias Gaitán, presidente de la Academia Nacional de Arquitectura, expresó que para 2030 se espera que la zona metropolitana del Valle de México sea habitada por 23 millones de personas, con una población dispersa que en este momento casi alcanza mil 600 kilómetros cuadrados.

En este escenario, añadió, enfrentamos prácticas especulativas, rezagos en infraestructura, baldíos urbanos, espacios públicos limitados, transporte público deficiente, insuficiencia y congestión vial y pocos programas de consolidación de barrios y colonias.

Por su parte, Felipe de Jesús Gutiérrez Gutiérrez, ex presidente del Colegio de Arquitectos, resaltó que uno de los principales problemas de la metrópoli es la reducción de la movilidad.

Para 2020, aseguró, se estima un total de 28.3 millones de viajes en días laborales, lo cual generará más conflictos de saturación vial. El número de viajes entre el Distrito Federal y los municipios conurbanos pasará de 2 millones a 5.7 millones de viajes al día.

Además, hay rezago económico en municipios metropolitanos, enclaves fortificados y privatización del espacio público por razones de seguridad, pérdida de sustentabilidad, así como falta de estrategia en el saneamiento de aguas negras y aumento de asentamientos irregulares en zonas de riesgo.

Al respecto, Roberto Eibenschutz Hartman, investigador de la UAM-Xochimilco, manifestó que la primera tarea para resolver los problemas metropolitanos es definir este tema como una prioridad política entre los legisladores.

Dijo que incluir el concepto metropolitano en la Constitución es fundamental para reconocer el fenómeno, pero también se requiere legislar sobre todos los aspectos que involucran el desarrollo urbano y la coordinación entre las diferentes jurisdicciones involucradas en la metrópoli.

Manuel Perló Cohen, del Instituto de Investigaciones Sociológicas de la UNAM, sustentó que los legisladores no tienen una agenda común que vincule los intereses en la Ciudad, por lo que no se han logrado acuerdos.

Para ello, dijo, es necesario avanzar en la planeación, crear nuevas instituciones que simplifiquen los servicios en la zona metropolitana, y constituir organismos metropolitanos.

Además, Jorge Gamboa de Buen, director general del Grupo Danhos, precisó que la única manera para que la Ciudad salga adelante es fortaleciendo su economía, por ejemplo, a través del cobro del predial que se reinvierte en infraestructura y espacio público.

Agregó que la pérdida de la capacidad competitiva está relacionada en buena medida con la falta de infraestructura, ya que se le ha quitado a la Ciudad de México dinero por la pugna entre partidos, así como por la falta de recaudación de impuestos, restricciones al crecimiento económico y la crisis económica.

Por su parte, Adriana Lobo, directora Ejecutiva del Centro de Transporte Sustentable, destacó que los principales problemas que afectan al capitalino son la movilidad y el transporte, ya que las distancias entre las viviendas y los lugares de trabajo han crecido considerablemente.

Sin embargo, puntualizó que la congestión de tránsito no se ha resuelto en ningún lugar del mundo; “lo que se ha logrado es reducir la circulación de los vehículos” y se han buscado otras modalidades de transporte, como el uso de energía.

En su turno, Jesús Anlen Alemán, procurador fiscal del Distrito Federal, manifestó que el Fondo Metropolitano de Proyectos de Impacto Ambiental en el Valle de México, es útil y necesario para el crecimiento integral de la Ciudad

Con la creación del Fondo y su aplicación se ha demostrado que se puede trabajar conjuntamente entre distintos gobiernos, sin importar partido político, ya que se acordaron distintas obras y se coordinó el mejoramiento de los ciudadanos al crear nuevos espacios de acción pública.

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