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La crueldad hacia los animales domésticos y silvestres es un problema que debemos atender y es una obligación de todos comprender que su dignidad es el reflejo de nuestra educación y cultura, manifestó la senadora panista Silvia Guadalupe Garza Galván.
Por ello, propuso reformar la Ley General de Equilibrio Ecológico y Protección al Ambiente, a fin de establecer la necesidad de generar un marco regulatorio que defina específicamente qué es  el trato digno y respetuoso de un animal.
La legisladora explicó que no es suficiente la sola denominación de “respeto y dignidad”, ya que se trata de conceptos subjetivos que cada individuo puede entender de la manera que mejor le parezca, sienta o favorezca.
Refirió que las acciones legales contra el maltrato animal son cada vez más “rígidas”, debido a los abusos cometidos por muchas personas, ya que por ignorancia, maldad, enfermedad o tradición, dan un trato inadecuado a la fauna doméstica y de consumo.
Por otro lado --explicó-- cuando una autoridad decomisa un ejemplar de vida silvestre, el tema de trato digno y respetuoso no es una premisa fundamental para sancionar a los responsables de un cautiverio en condiciones indignas para los animales, lo que genera “una mala cultura social hacia estos seres vivos”.
Aunado a ello, mencionó que de forma frecuente los procedimientos administrativos y penales “se vuelven litigios de años porque los propietarios de animales silvestres, fuera de toda racional conciencia, luchan por poseer animales pese a la ausencia de un concepto general sobre las condiciones de dignidad y respeto de cada ejemplar”.
De igual forma, apuntó que las autoridades competentes no cuentan con una referencia expresa sobre las condiciones que animales en cautiverio deben tener para a llevar una vida digna y que eviten o disminuyan la tensión, sufrimiento, traumatismo y dolor.
Ante este panorama, dijo, corresponde al Gobierno Federal expedir la norma oficial mexicana que determine los principios básicos de trato digno y respetuoso previsto, así como vigilar su cumplimiento.
Mencionó que la crueldad hacia animales “es una señal de alarma de la violencia social”, por lo que resulta importante impulsar acciones punitivas a favor de la vida y bienestar de esos seres vivos.
La iniciativa se envió a las comisiones unidas de Medio Ambiente y Recursos Naturales y de Estudios Legislativos.
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