La senadora Adriana González Carrillo, del PAN, afirmó que es necesario adoptar un cambio de visión ante las nuevas amenazas que representa el crimen organizado asociado con el narcotráfico.

“Es uno de los fenómenos que emergen como principal desafío mundial”, subrayó durante su participación en la XI Reunión de la Comisión Parlamentaria Mixta México-Unión Europea.

Además, aseguró que la agenda de seguridad debe ser abordada bajo un esquema de cooperación regional y de responsabilidad compartida para complementar las capacidades nacionales, contribuir al desarrollo, al desarrollo institucional, al mantenimiento de la seguridad y la paz internacionales.

Explicó que en el Informe de Seguridad Ciudadana y Derechos Humanos, elaborado por la Comunidad Interamericana de Derechos Humanos, se destaca que en la región -México- se registran los índices más altos de violencia.

La tasa de homicidios por cada 100 mil habitantes alcanzó 25.6 por ciento, frente a los bajos niveles de Europa, que es de 8.9 de cada 100 mil habitantes, agregó.

En su exposición en el Seminario Retos y amenazas a la seguridad nacional e internacional. Política mundial contra el narcotráfico, puntualizó que los altos niveles de criminalidad y violencia generan obstáculos para la gobernabilidad democrática, y provocan bajos índices de confianza de la población hacia el gobierno, parlamento, política y el sistema judicial.

A su vez, la diputada del partido popular europeo, Teresa Jiménez-Becerril, destacó que Colombia es el mayor productor de cocaína -62 por ciento a nivel mundial-, seguido de Perú y Bolivia.

Añadió que la industria de la cocaína se asocia directamente a la pobreza y al subdesarrollo de la región.

Además, señaló que 90 por ciento de la cocaína que llega a Estados Unidos, proviene de México como país de tránsito, lo que da lugar al surgimiento de los cárteles en el país y el desencadenamiento de la violencia sin precedentes.

En el tema de seguridad, consideró que se debe contar con una política común que fortalezca los estados y sociedades, ya que con ello se debilitará a terroristas y criminales.

Estimó que el problema de narcotráfico y terrorismo no acabará pronto, por lo que “no podemos dar consejos, sino ser solidarios con ustedes”.

“La sociedad mexicana no debe negociar con criminales ni terroristas aunque los maten, pero tampoco se debe premiar por no matar”, finalizó Jiménez-Becerril.

Al abordar los Modelos de seguridad social y política laboral, el senador priista Carlos Jiménez Macías, aseveró que las crisis de los sistemas de salud son parte de la irresponsabilidad del modelo económico que asistió excesivamente el mercado e hizo de lado la tarea conjunta del gobierno, empresa y trabajadores para construir un esquema de seguridad social.

Agregó que en México, el gobierno sólo abonó al gasto corriente del IMSS e ISSSTE –instituciones de salud-, en lugar de contribuir a su reserva financiera para garantizar a largo plazo las pensiones.

En el mismo sentido, Gianluca Susta, diputado del Partido Democrático de Italia, propuso replantear el sistema de protección social con la finalidad de que los sistemas de acceso al trabajo estén acordes a la actualidad.

Además, pidió que tanto México como la Unión Europea presenten en foros internacionales el tema de la seguridad social como uno de los principales derechos del siglo XXI.

Previo al Seminario, los dirigentes nacionales del PRI, PAN y PRD, Beatriz Paredes Rangel, César Nava Vázquez y Jesús Ortega Martínez, sostuvieron, por separado, un intercambio de puntos de vista con los parlamentarios de la Comisión Mixta.

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