El Senado de la República pidió al Ejecutivo federal que, a través de la SAGARPA y la Secretaría de Economía, ejecuten acciones y estrategias para enfrentar la especulación y la variación de precios en el mercado de granos y remita un informe.

Lo anterior, debido a que la volatilidad en los precios genera riesgos adicionales, además de que es una carga extra, especialmente para los productores de bajo ingreso que tienen menos mecanismos para hacer frente a las fluctuaciones.

De igual forma, se afecta a los consumidores de bajos recursos, ya que deben destinar una mayor parte de su gasto a la compra de comida.

En el dictamen avalado, se explica que se deben buscar factores de orden macroeconómico para atender la problemática de la fluctuación de precios en los granos básicos.

Más adelante, los senadores solicitaron al Ejecutivo federal, a través de la Comisión Intersecretarial para el Desarrollo de los Bioenergéticos, un informe de los planes o programas realizados para fomentar el desarrollo relacionado con la producción, comercialización y el uso de éstos.

También, hicieron un llamado al Ejecutivo federal, a la Comisión Intersecretarial para el Desarrollo de los Bioenergéticos y al director general de Pemex, para que fortalezcan y aumenten los programas que impulsen el uso de biocombustibles como medida sustituta del petróleo.

Asimismo, para apoyar las investigaciones respecto a la producción, distribución y uso de este tipo de energéticos, a fin de disminuir la dependencia hacia el petróleo, consolidar la economía del país y evitar las consecuencias del cambio climático.

Posteriormente, el Pleno exhortó a la Junta de Gobierno del Instituto Nacional de Estadística, Geografía e Informática, para que coadyuve con el Comité Nacional de Desarrollo Sustentable de la Caña de Azúcar, a efecto de producir información de interés nacional con respecto a la producción azucarera.

Al referirse al tema de los granos, el senador Ricardo Monreal Ávila, del PT, dijo que la política agropecuaria oficial ha marginado, olvidado y subestimado a los pequeños productores que se dedican a esta actividad.

“Lamentablemente se persiste en un esquema, un modelo económico neoliberal que ha hecho más pobres a los productores, los ha hecho más dependientes y ahora atraviesan por una etapa, quizás la más grave, en la historia del agro nacional”, puntualizó.

Por su parte, el senador perredista Antonio Mejía Haro señaló que es imperante lograr las reformas que necesita el campo mexicano, porque no es posible que con mucho sacrificio se obtienen las cosechas y cuando el productor quiere venderlas los precios se deprimen precisamente por la especulación.

“Pero también por la falta de políticas públicas, porque es precisamente en esos momentos cuando luego se abren los cupos de importación”, manifestó.

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