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El senador priista Heladio Ramírez López reconoció que “intereses de la cúpula eclesiástica” buscan dar marcha atrás con los principios y conceptos históricos de la República y “no podemos abrir la puerta para que se atente contra la educación laica y gratuita”.

Por ello, dijo, la conmemoración del 206 aniversario del natalicio de Benito Juárez  es una ocasión inmejorable para recordar no sólo la vida del expresidente oaxaqueño, “sino sobre todo su pensamiento político que impregnó una de las etapas más dramáticas de la historia de nuestro país que culminó con las Leyes de Reforma”.

Al referirse al natalicio del Benemérito de la Américas, el legislador expresó ante el pleno senatorial que dichas leyes “desafiaron y fracturaron la intolerancia y los poderosos intereses  de toda una fracción conservadora” e inauguraron una época de cambio para bien de la nación.

“No fueron una actitud antirreligiosa del Benemérito como lo han querido sostener sus detractores, pues Juárez nunca renegó de su fe católica y él fue quien declaró como fiesta nacional el 12 de diciembre, día de la Virgen de Guadalupe”.

Ramírez López subrayó que las Leyes de Reforma fueron la afirmación del principio del Estado laico separado de las iglesias, “así como acciones de reivindicación del poder civil frente a los abusos y atropellos del clero tanto en la esfera económica y financiera como en el manejo de la educación y los asuntos civiles de los ciudadanos”.

En este momento, enfatizó, México tiene la urgencia de vencer “terribles flagelos” como la pobreza, la violencia, la institucionalidad debilitada por la burocracia y la enorme y terrible corrupción.

Y cuando parecía que se habían superado “las inercias coloniales para alcanzar la modernidad que exigen los tiempos de la globalización, intereses de la cúpula eclesiástica y los sectores más duros de la derecha buscan dar marcha atrás con los principios y conceptos históricos, jurídicos, políticos y culturales de la República”, reiteró.

Por eso, “no podemos abrir la puerta para que se atente contra la educación laica y gratuita, y menos anular el concepto mexicano de laicidad que es la viga maestra de nuestro estado-nación”, asentó.

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