La Cámara de Senadores exhortó al Ejecutivo federal para que elabore e implemente, a través de las secretarías de Salud y de Educación Pública, un programa nacional de salud mental.

El estrés, violencia intrafamiliar, así como problemas económicos y sociales --expuso la Comisión de Salud en el dictamen-- son causas que provocan enfermedades mentales como el déficit de atención, depresión, trastorno bipolar, ansiedad generalizada, crisis de angustia, pánico, estrés grave, autismo y esquizofrenia, entre otros.

Pero estos padecimientos, resaltaron los legisladores, “son prevenibles mediante programas y campañas adecuados”.

Según el punto de acuerdo avalado, en México se presentan con más frecuencia patologías relacionadas con la salud mental y hay “un alarmante rezago” en su atención, pues el 15 por ciento de la población padece de algún trastorno y sólo 2.5 por ciento recibe tratamiento.

La Encuesta Nacional de Epidemiología Psiquiátrica registró que el 28.6 por ciento de la población presentó en su vida uno o varios de los 23 trastornos mentales clasificados a nivel internacional.

Los padecimientos más frecuentes fueron ansiedad, en 14.3 por ciento de la población, seguidos por el uso de sustancias, 9.2 por ciento y los trastornos afectivos, con el 9.1 por ciento.

A nivel individual, las fobias específicas fueron las más comunes con el 7.1 por ciento de la población, los trastornos de conducta, 6.1 por ciento, la dependencia al alcohol, 5.9 por ciento, la fobia social, 4.7 por ciento y el episodio depresivo mayor, con 3.3 por ciento.

El suicidio, se destaca, es la consecuencia más trágica de la depresión y de acuerdo con el INEGI, en 38 años --de 1970 a 2008-- la tasa de suicidios se mantuvo con un incremento anual de 16.5 por ciento en promedio, pero se disparó a 33 por ciento a mediados de 2009.

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