El senador Felipe González González, del PAN, presentó reformas a las leyes de Desarrollo Rural Sustentable, Desarrollo Forestal Sustentable y Agraria, para establecer las bases jurídicas que permitan implementar un Sistema Nacional de Reconversión de Cultivos de Uso Ilícito.

Ello, a partir de un trabajo coordinado entre los tres órdenes de gobierno y con la participación de la sociedad organizada, a efecto de impulsar el desarrollo sustentable del campo mexicano, así como un combate eficaz al tráfico de drogas.

La propuesta también pretende incorporar al Programa Especial Concurrente la reconversión de cultivos de uso ilícito.

En la tribuna, el legislador advirtió que México es considerado uno de los países “más importantes” en materia de origen y tránsito de drogas ilícitas y donde la erradicación de plantíos y decomiso de drogas, sobre todo en amapola y marihuana, no han tenido el impacto que se necesita para inhibir su producción y consumo.

Enfatizó que en algunos reportes se menciona que por cada hectárea fumigada se siembran tres, por lo que se calcula un incremento de 200 por ciento en la superficie que se utiliza para siembras ilícitas.

Citó que en 2009 la superficie en México, donde se produce droga, aumentó 35 por ciento, lo que equivale a cerca de 12 mil hectáreas. Además se incrementó a 3.5 millones de personas que probaron algún tipo de narcótico o droga y de éstos, 600 mil se han convertido en adictos.

González González destacó que de acuerdo con informes de los órganos de inteligencia de México la producción y consumo de drogas ilícitas aumentó considerablemente en el periodo de 2008-2010.

“Se calcula que en el 2010 más de 150,000 personas se dedicaron en México al negocio de las drogas y otras 300 mil al cultivo y procesamiento de mariguana y opio”, detalló.

Ante esta situación --dijo-- se debe reflexionar para mejorar las condiciones sociales y económicas de la población campesina en las áreas de mayor producción de drogas, para evitar que las vuelvan a producir, y se atienda a la vocación natural de cultivos lícitos.

Señaló que la erradicación de cultivos lícitos debe llevarse a cabo por las fuerzas de Estado, sin vulnerar los derechos humanos ni afectar el medio ambiente y cumplir en general los tratados y convenciones internacionales firmados por el país.

Sin embargo, reconoció que pese a los grandes esfuerzos de elementos de seguridad pública federal y de las Fuerzas Armadas, no se ha logrado disminuir y mucho menos erradicar de manera significativa la producción de cultivos ilícitos.

La iniciativa se turnó a las comisiones de Desarrollo Rural, de Agricultura y Ganadería y de Estudios Legislativos para su análisis.

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