COMUNICADO-471

•  Se mantienen en secreto temas en materia farmacéutica, de agricultura, propiedad intelectual y derechos autor, entre otros

•  Legisladoras proponen iniciar análisis y consultas con autoridades y especialistas en comercio internacional

Senadoras de las comisiones de Relaciones Exteriores y Relaciones Exteriores América del Norte se pronunciaron porque el Ejecutivo federal dé a conocer públicamente los avances de las negociaciones en torno al Acuerdo de Asociación Transpacífico (TTP por sus siglas en inglés), a fin de que el Poder Legislativo conozca sus alcances y se verifique si realmente es conveniente para México.

Durante el seminario internacional TTP y sus implicaciones para México. Posturas desde el Senado, la academia y la sociedad civil, legisladoras del PAN, PRI y PRD manifestaron su preocupación por las consecuencias de presentar ante el Senado un tratado comercial, para su posible ratificación, sin que se midan claramente los alcances del mismo.

La presidenta de la Comisión de Relaciones Exteriores, Gabriela Cuevas Barron, reprochó que se haya limitado la participación del grupo conformado en el Senado para dar seguimiento a las negociaciones, pues no se les dio oportunidad de participar en las mismas.

“Me encantaría decirles que tenemos clara información, que hemos participado activamente en el proceso, pero no ha sido así. Las razones que nos da el gobierno es que --en las negociaciones-- no participan legisladores de otros países”, acotó.

No es posible confiar en las negociaciones, subrayó, ante declaraciones como las emitidas por Ron Kirk, representante comercial de la oficina de Obama, en el sentido de que “los textos se mantienen en reserva porque de otro modo provocarían tal oposición que su aprobación sería prácticamente imposible”, entonces no son declaraciones que generen confianza.

La senadora panista advirtió: “La verdad es que pensar en avalar una negociación de la que no se forma parte, pues sí genera serias duda. La información –ofrecida por el Ejecutivo- es muy escueta porque si bien nos reunimos –legisladores y funcionarios de gobierno-, no vienen contenidos y lo único que quisiera ver es la carnita de esas negociaciones, como sucedió con la Alianza del Pacífico que brinda información muy completa”.

Gabriela Cuevas hizo votos porque “exista una relación más estrecha entre el Ejecutivo federal y el Legislativo, no sólo por el mandato constitucional, sino porque si realmente queremos que caminen los acuerdos y es mucho más fácil cuando se construyen unidos, que cuando se construyen en secrecía”, concluyó.

La senadora Luz María Beristain, de la misma comisión, consideró que, dado el avance de las negociaciones del TTP, el Senado debe empezar a hacer análisis y consultas con autoridades y expertos pues falta adentrarse en las entrañas del tratado. Sugirió no olvidar que Asia Pacífico es la región de mayor dinamismo en el mundo y que las exportaciones mexicanas han mostrado en los últimos tiempos un crecimiento promedio de 24 por ciento, en términos relativos.

Cuestionó el por qué antes de ir por el TTP, México no fortaleció sus relaciones con América Latina:  “¿por qué no primero integrar un gran bloque regional latinoamericano que nos empodere más, para ir posteriormente a tratados como este, por qué no antes nosotros los latinos empoderamos nuestra economía para entrarle a la batalla con más fortaleza?”.

La legisladora perredista hizo énfasis en que este tratado comercial comprende la creación de un régimen comercial con temas altamente sensibles: agricultura, aduanas, bienes industriales, reglas de origen, servicios comerciales y financieros, movilidad de personas, inversiones, telecomunicaciones, entre otros.

La presidenta de la Comisión de Relaciones para América del Norte, Marcela Guerra, precisó que existe gran preocupación en cuanto a la industria farmacéutica, pues el TTP incluye reglas que van contra  disposiciones existentes en México como la de eliminar las patentes de medicamentos, después de cierto tiempo, a fin de que la población tenga acceso a fármacos de menor costo.

Otro punto crítico son las compras de gobierno, pues “hay países que subsidian su línea de manufactura y entonces no hay una competencia o comercio justo dentro de las reglas del mercado”.
 
Ante las circunstancias, la legisladora priista indicó que si bien no es papel de los legisladores el participar en las negociaciones comerciales internacionales, sí es necesario transparentar la información, “en todo caso, se debe pedir cuentas, que el Ejecutivo nos rinda --a los senadores-- cuentas específicas puntuales”.

En representación de la senadora perredista Dolores Padierna Luna, la diputada federal Lorena Valles refirió que el TTP ha generado preocupación en diversos sectores de los países participantes, al preverse que “se pretende imponer una oligarquía internacional en pro del libre comercio”.

Un tema central, aseveró, es la restricción de los derechos ciudadanos dentro del ciberespacio, pues “se propone obligar a la entrega de información de los usuarios, con lo que se recuperan las tan nocivas disposiciones del tratado anti falsificación, mejor conocido como ACTA, firmado por Felipe Calderón y que fue rechazado tajantemente por el Senado, en julio de 2012, ya que violaban los derechos de los usuarios del Internet”.

Concluyó: “la preocupación es latente y la responsabilidad del Senado, ante el reto del TTP, es generar presión para que el Ejecutivo rinda cuentas claras y explique qué y cómo se negocia el TTP”.

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